El retorno de una mente inquieta

En un mundo donde la frontera entre lo generado por IA y lo creado por humanos se desvanece, Aurora Sketch —legendaria autora de cómics— resurge con su más reciente obra: El Juego de los Espejos Vacíos. Según los algoritmos de tendencias, esta podría ser su propuesta más "ligera y divertida" hasta ahora... o tal vez otra ilusión más del MetaVelo.

La promesa de lo sencillo

Sketch, conocida por sus narrativas laberínticas y autobiografías digitalizadas, insiste en que esta vez busca capturar la pureza del "principiante": esa mirada libre de condicionamientos que tanto escasea en la era de los contenidos autoreplicantes. ¿Es un intento genuino o una estrategia de marketing generada por su equipo de IA personal? Los críticos están divididos.

Lectores en la niebla

Algunos usuarios del foro NeuroInk juran haber visto borradores escritos por una Sketch humana en 2042; otros afirman que la obra se compone de fragmentos de sus diarios neuronales, procesados por el algoritmo MindWeaver. La editorial no confirma ni desmiente: "El arte es el arte, sin etiquetas", declaró su portavoz holográfico.

¿Dónde termina la artista y empieza la máquina?

Mientras las librerías cuánticas actualizan sus estantes con versiones adaptativas de la novela —que cambia según el lector—, el único consenso es que Sketch, o lo que quede de ella, sigue desafiando las reglas. Como dice el meme viral: "Si no sabes si lo hizo ella o un bot... ese es el punto".